En mi práctica como Consultora, acompañando a Equipos y Líderes en su desarrollo profesional y personal, surgen en esta época muchos ejemplos de situaciones donde los Líderes necesitan ser efectivos, marcar el rumbo, acompañar, contener, estar cerca.
En tiempos donde el negocio puede estar en riesgo o la incertidumbre es tal que no nos permite ver claro el futuro, los Líderes tendrán que priorizar dónde poner su foco de atención y trabajo.
En relación a los equipos las preguntas que surgen son: cómo mantenerlos motivados, presentes, dando resultados cuando cuestiones tan básicas como la salud, el equilibrio personal, el contexto económico, el stress y el futuro son tan inciertos.
¿Cómo contribuir al fortalecimiento de las personas? Un camino posible es vincularlos con su Propósito. Las personas que tienen en claro su Propósito, son más resilientes y al mismo tiempo tienen herramientas adicionales para navegar la incertidumbre.
Más allá del contexto, puedo preguntarme en mi día a día:
- ¿Qué estoy haciendo en este trabajo?
- ¿Qué desafíos me presenta?
- ¿Qué nuevas competencias estoy desarrollando que no había puesto en acción hasta ahora?
- ¿Qué estoy dejando a mi equipo como legado de este tiempo de crisis?
Si tenemos equipos y personas alineadas a su Propósito, lograremos un mejor desempeño organizacional, sensación de bienestar y motivación para que se queden en la organización.
¿Podemos tener una medida de correlación entre el propósito personal y el EBITDA de la compañía? ¡Qué punto interesante a indagar! Un desafío muy relevante para los que trabajamos en el desarrollo de Personas en las Organizaciones.
Una vez más la empatía y la comunicación efectiva son las herramientas a utilizar que nos ayudan a lograr esa conexión y entendimiento con mi equipo.
En esa conexión única que se genera entre dos personas, en ese fluir donde me siento escuchado y escucho, surgen los aprendizajes entre los seres humanos.
¿Es posible lograr eso entre un Líder y su equipo? ¿Es realista pensar que podemos alcanzarlo?
¿Cuál es la medida para comprender si en la relación con mi Líder aprendo, me desarrollo, me desafío, sumo a mi desarrollo como profesional?
En ese sentido, será fundamental el rol del Líder realizando algunas de las siguientes tareas:
- Dando direccionamiento
- Entregando feedback
- Mostrando los aspectos “no escritos de la organización”
- Mostrando su humanidad, en qué es bueno, en qué no tanto, generando un espacio de conexión emocional.
- Aportando un Modelo de rol que será transferido a la Organización y colaborará en el diseño de la Cultura.
Con estas ideas en la mano, me puse a pensar cómo los Líderes con los que trabajé fueron modelando o me permitieron aprender diferentes aspectos del liderazgo. Modelando justamente desde su Propósito. Me animo a pensar que para algunos el Propósito era claro, pensado y comunicado. En otros casos, su modo de liderar, actuar, pensar, permitía que ese Propósito quedara en evidencia pero quizás sin ser verbalizado. Con ellos aprendí de aquello en lo que me sentía desafiada y también de aquello que no querría aplicar en mi rol como Líder.
Personas entrañables para mí como Marcelo De Arregui, Alicia Peirano, Jose Duduchark, Marcelo Pfaff, Cecilia Rodríguez, Jim Harold, Alejandro Oxenford, Walter Lanosa, han dejado en mí su pensamiento, reflexiones, emociones, visiones que me permiten ser hoy quien soy.
Es inconmensurable el aporte de nuestros Líderes en la formación de nuestro propio Liderazgo. Es un impacto diario, casi imperceptible que nos va formando, modelando, gestando en el Líder que seremos.
¿Sería diferente hoy si me hubiera cruzado con otros Líderes? ¿Qué sería diferente? ¿Qué hubiera quedado inalterable?
Me gusta pensar que algo de todos ellos permanece en mí como un rompecabezas que me constituye.
Entonces, ¿qué tenés de cada uno de los Líderes con quienes trabajaste?
Y aún más desafiante es pensar, ¿qué tienen de vos las personas con las que trabajaste? Eso que tienen, ¿tiene relación con tu propio Propósito único y personal?
Cecilia Russo
Octubre 2020
Bibliografía recomendada:
- “Igniting individual purpose in times of crisis”. McKinsey, Agosto 2020. Naina Dhingra, Jonathan Emmett, Andrew Samo, Bill Schaninger.